El museo del sexo en Nueva York, uno de los más visitados de la ciudad

Situado en la Quinta Avenida, muy cerca del Empire State Building, en un lugar con tráfico constante de viajeros y viandantes, el Museo del Sexo de Nueva York no es ni mucho menos una rareza en la ciudad, sino la constatación de que en la Gran Manzana uno puede conocer todo lo que desee. A través de este museo, de sus exposiciones y salas, conoceremos la evolución del sexo y la sexualidad a lo largo de toda la historia, con un montón de objetos, desde juguetes eróticos a trajes y lencería, pasando por libros y videos subidos de tono. Un museo donde divertirse es una obligación.

Es cierto que muchos “acusan” al MoSex, como también se conoce a este museo, de ser demasiado conservador, de mostrar una visión demasiado científica de la sexualidad. Pero es cierto que estamos hablando de una entidad realmente cultural, y no de un sex-shop ni nada de eso. Es un lugar realmente interesante donde encontraremos más de 20.000 objetos dedicados al sexo y a la sexualidad, repartidos por todas sus salas, de todas las épocas. Un sitio que disfrutar, tal vez no de los más conocidos de la Gran Manzana, pero sí muy curioso e interesante, por todo lo que podemos aprender en él.

Exposiciones que penetrarán en tus recuerdos

En el MoSex podemos encontrar más de 20.000 objetos permanentes entre los que hay carteles de bares antiguos, de actuaciones de travestis, prendas íntimas de todas las épocas, juguetes sexuales, vídeos y cintas originales de las películas para adultos de las décadas anteriores… Cualquier cosa que se te ocurra y tenga relación con el sexo estará representada en este completísimo museo, que además presenta habitualmente exposiciones no permanentes, centradas en temas más concretos, como por ejemplo, la obsesión sexual en Asia, o el Sexo en la Literatura. Son exposiciones muy interesantes que no deberíamos dejar de visitar.

Tours y visitas guiadas

Al encontrarse muy cerca del Empire State Building, son muchos los viajeros que deciden darse una vuelta por el museo antes o después de subir al emblemático edificio. Podemos entrar por libre, y hacerlo a nuestro aire, pero lo más recomendable es buscar algún tour de los muchos que se ofrecen, o incluso una visita guiada, para entender mejor todo lo que allí está expuesto y salir con mucha más información en la cabeza. Estas visitas son algo más caras, claro está, pero valen mucho la pena, sobre todo si tenemos un buen nivel de inglés, para poder entenderlo todo y escoger las de este idioma, que son mucho más frecuentes.

Funland, un lugar que no querrás perderte

Uno de los espacios más especiales y peculiares de todo el museo es Fun Land, una especie de parque de atracciones para mayores, con camas elásticas, castillos hinchables y todo tipo de juegos relacionados con la sexualidad. Es un lugar muy divertido donde pasaremos un rato inolvidable en estas atracciones, y donde podremos sacar a ese niño travieso que llevamos dentro. Funland está incluido en la admisión del museo, así que no tendrás que preocuparte absolutamente por nada, porque podrás visitarlo sin ningún problema si estás dentro.

La tienda del museo

Como todo buen museo que se precie el Museum of Sex de Nueva York también cuenta con su propia tienda, llena de todo tipo de souvenirs que podremos llevarnos de vuelta a casa, siempre que no tengamos problema en ser tachados de libidinosos. Y es que lo que podemos encontrar en la tienda de un museo del sexo es, precisamente, lo que cualquiera pueda imaginarse. Posters, libros y películas eróticas, juguetes sexuales, recuerdos del propio museo con su logo, ilustraciones, cuadros, tazas, peluches, ropa y lencería… El magazine Time Out la escogió como una de las mejores tiendas de museos de Nueva York, así que al menos habrá quedarse una vuelta por ella para comprobarlo…

Dirección, precios y horarios del museo

El Museum of Sex de Nueva York se encuentra ubicado muy cerca del emblemático Empire State Building, concretamente en el 233 de la Quinta Avenida, en la esquina con la calle 27. De domingo a jueves, el museo abre de 10:30 de la mañana a 11 de la noche, mientras que durante el fin de semana, en la noche del viernes y el sábado, permanece abierto una hora más, hasta la medianoche. La entrada al MoSex cuesta actualmente 20,50 euros, un precio relativamente razonable para esta ciudad, en la que todo sale por un ojo de la cara. Si es tu primera vez en Nueva York tal vez te convenga más visitar otros lugares, pero si estás de paso y te apetece conocer un poco más la historia de la sexualidad, no hay mejor lugar en el mundo que este museo.